El país
El gobierno declaró lo siguiente:
Este último jueves 15 de noviembre se produjo un golpe
de estado llevado a cabo por el Gobierno de Chicago cuyo líder máximo es Marcus
Eaton. El nuevo gobierno pretende mantener el orden mediante la división de la
población en cinco categorías gracias a una prueba de aptitud, realizada a los
dieciséis años, que se basa en la personalidad de cada persona. Estas
categorías son en primer lugar, los sinceros cuya virtud es la verdad, los
altruistas que se identifican por la abnegación, los valientes que se caracterizan
por su osadía, los pacíficos que se distinguen por su cordialidad y, por último,
los inteligentes que destacan por su erudición. Las personas que no pertenecen
a ninguno de estos grupos son los llamados “divergentes”. Los divergentes se
convierten en los abandonados teniendo los peores trabajos.
Personaje conformista:
Me llamo Johanna Reyes y pertenezco al grupo Cordialidad. Nuestro grupo se
caracteriza por la paz y la tranquilidad, por eso, gracias al nuevo gobierno,
la violencia ya no forma parte de nuestras vidas.
Desde entonces, nuestras vidas son más seguras ya que todo está controlado
y cualquier forma de violencia será sancionada. De esta manera, podemos evitar el
mal y vivir lejos de los peligros. Además, estas divisiones son necesarias para
el progreso de la sociedad, dado que cada uno desempeña un papel específico en
función de su personalidad. Por otra parte, es posible garantizar un mejor
entendimiento entre las personas de un mismo grupo y, una vez más, garantizar
más paz y tranquilidad.
A pesar del desacuerdo de muchas personas, hay que saber que el objetivo de
la vida es ser feliz, y para alcanzar esta felicidad, tenemos que quedarnos
bajo el refugio de la élite cuya intención es protegernos.
Personaje rebelde:
Me llamo Tris, tengo dieciséis años y antes de la insurrección de este
nuevo gobierno tenía una vida normal y tranquila, como todos los adolescentes
iba al instituto. Me gustaba mucho mi vida con mi familia y mis amigos.
Sin embargo, ahora todo es diferente, nos han separado en cinco grupos y no
estoy de acuerdo para nada con este sistema. Para mí, no se puede clasificar a
la gente así, todos somos diferentes y nos necesitamos los unos a los otros. Dividir
a la gente en categorías según su personalidad es incomprensible y no es
productivo.
Además, yo soy un caso raro porque tras la prueba de aptitud detectaron que
no pertenezco a ninguno de los cinco grupos, entonces soy divergente. Tengo que
disimularlo y, para ello, me he integrado al grupo de los valientes. Dentro de
este grupo podré investigar y encontrar un fallo dentro del sistema gobernante
porque quiero derribarlo, hay que derribarlo. Estoy segura de poder destruirlo
ya que se basa mucho en la tecnología y además es fácil para mí entrar en los
servidores informáticos y provocar cortocircuitos.
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